El diseño es embajador de nuestra marca
Todos los emprendedores deseamos ser reconocidos por nuestra marca, y otros más visionarios por dejar huella en la sociedad, es por ello que debemos tener una atención especial a la imagen que proyectamos, y todo esto empieza desde nuestro logotipo hasta la experiencia de nuestros clientes con el producto.
En este artículo daremos un vistazo por la parte gráfica de este importante elemento.
El inicio de nuestra identidad corporativa es el logotipo. Un buen logotipo debe ser capaz de sintetizar la esencia de la marca de forma clara, directa y simple, ya que de esta manera será más fácil de recordar por nuestro grupo objetivo. En lo personal, prefiero hacer de esto un proceso y no una selección de imágenes "bonitas" combinadas para mostrar un conjunto de figuras y texto.
Dicho proceso inicia desde conocer cuál es o será la filosofía y personalidad que se quieren imprimir en el logotipo. Se debe realizar una investigación previa para poder entender a cabalidad los elementos que harán que podamos decir lo correcto de forma adecuada.
Una vez tenemos decidido el diseño del logotipo, debemos apegarnos a la filosofía de la marca para poder mostrársela al mundo, con ello debemos ser capaces de decir por ejemplo que somos un producto divertido, práctico, que ayuda a dedicar menos tiempo a alguna tarea tediosa, o bien que hace más fácil la vida.
Es necesario que cada pieza, desde la tarjeta de presentación, hasta el reporte de actividades y no se diga las piezas que se publican en Redes Sociales obedezcan a la identidad de la marca, que aunque no sea posible plasmarlo todo en cada pieza, puedan hacerlo en conjunto.
